miércoles, 4 de abril de 2007

TU RECUERDO


Mi mirada se pierde al llegar el crepúsculo,
allá en el horizonte que juntos navegamos.
Tierna imagen sutil, que en ti reúnes todo,
oh sublime mujer, cuanto te extraño!

La soledad me embarga al esconderse el día
tus manos ya no tocan mi piel desconsolada.
agua de manantial que sacia mis locuras,
oh Diosa encantada, acaso no me extrañas?

En que nido de amor reposará tu cuerpo,
quién te descubrirá, como yo en cada noche.
Venus de mis locuras, fruta encantada,
Oh divina ilusión, dónde te escondes?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Este poema me encanta!